Bielsa ve imprescindible la continuidad de Llorente, Muniain y Javi Martinez.
A falta de que se confirme la renovación de Marcelo Bielsa al frente del Athletic, la rumorología sigue creciendo en torno a la entidad rojiblanca .Así, parece ser que el entrenador argentino ha pedido la continuidad de Fernando Llorente, Iker Muniain y Javi Martínez como condición para seguir en Bilbao.
Ya es una obviedad que Marcelo Bielsa ha querido apurar al máximo el plazo que se dio a sí mismo para responder a la oferta de renovación extendida por el Athletic. En la madrugada que siguió a la disputa de la final de Copa, habló de que se tomaría una semana para comunicar su decisión y hoy por tanto se entra en las últimas 24 horas, a no ser que empiece a contabilizar el tiempo desde el pasado sábado. Pero, de entrada, no parecía descabellado calificar la jornada de hoy viernes como 'el día D'.
Lo normal es que durante el día de hoy hubiera dado el paso que todos los estamentos que componen el Athletic aguardan con impaciencia y, por qué no decirlo, nervios. Basta darse una vuelta por la calle para comprobar la expectación que rodea a la suerte que vaya a correr el proyecto de argentino. En el seno del club también están acumulando motivos para sentirse incómodos, puesto que la apuesta realizada por la directiva de Josu Urrutia es inequívoca, nítida, frontal. Si resulta que para amplísimos sectores de la afición el futuro ideal pasa por la continuidad del técnico, qué decir del valor que le otorgan los inquilinos de Ibaigane a la palabra que les transmita.
Pero esta tesitura presidida por la incertidumbre, que podría ser considerada como tardanza, en absoluto puede tomarse como una indelicadeza por parte de Bielsa, que hay que insistir en que se mueve dentro de plazo. Por lo que se sabe de su personalidad, el rosarino es alguien exageradamente minucioso, alguien que no le pone límites de tiempo a cuanto esté conectado con su profesión, alguien al que le gusta sopesar a fondo cada cuestión, incluso el detalle más nimio, y el asunto que ahora le ocupa no es desde luego una banalidad.
Lleva Bielsa un buen puñado de horas reflexionando, mientras sus interlocutores permanecen a la expectativa, pendientes de que suene el teléfono. Bielsa ha estado combinando el ejercicio de colocar en la balanza los pros y los contras de una segunda campaña al mando del equipo rojiblanco, con una ininterrumpida actividad en las instalaciones de Lezama. Su horario de trabajo no ha diferido en exceso del que se impuso a lo largo de todos los meses en que la competición estuvo vigente. Quizá, mantenerse en su puesto como si nada pasara, sea la fórmula idónea para llegar a la meta que persigue, que no es otra que acertar.
Lo que sí se puede afirmar es que en su debate interno hay determinadas cuestiones que han tenido un peso menor, pese a que aparezcan como claves en este tipo de trances. Las condiciones económicas de su vínculo, por ejemplo, no han sido motivo para que la cuerda se tensara. Tampoco Bielsa ha estado barajando otros destinos, para compararlos con lo que el Athletic le ofrece en todos los sentidos. Es lógico imaginar que después del excelente trabajo realizado en Bilbao no le habrán faltado pretendientes, que más de dos y tres equipos habrán llamado a su puerta, pero Bielsa se ha centrado únicamente en negociar con el que todavía es su club.
En cambio, seguro que sí habrá tomado en consideración el escenario que se abre a partir del verano tras haber conducido al Athletic a dos finales. Sabe que el índice de exigencia o de presión no es el mismo que el que se encontró hace once meses, cuando voló desde Argentina para cruzar su mirada con la de los futbolistas que había estudiado a través de un sinfín de vídeos. No obstante, el reto que tiene ante sí, en el supuesto de que responda afirmativamente, no debería retraerle.
BIELSA renueva el permiso de residencia en España por dos años.
Después de haberle escuchado disertar largo y tendido sobre qué piensa del fútbol y de la vida, de cómo afronta su tarea, de cuál es su escala de valores y cuál su metodología, seguir ocupando el banquillo de San Mamés debe ser para él un reto muy sugerente, plagado de alicientes. Ahora además, tendría la posibilidad de organizar todo según su criterio, desde la pretemporada hasta la confección de la plantilla, aspectos en los que el pasado verano le tocó apechugar con planteamientos ajenos.
La valentía que ha rezumado el juego del Athletic, se antoja la cualidad esencial del responsable de esa imagen que ha encandilado a propios y extraños. De ahí que, en todo caso, se pueda confiar en que la dificultad que objetivamente entraña elevar un listón que se ha colocado tan alto, opere como un acicate en su cabeza.
Mientras Bielsa aún se lo sigue pensando, resulta que hemos podido saber que ha renovado el permiso de residencia en España por dos años. Tal vez quiera decir algo...
No hay comentarios:
Publicar un comentario